Hubo más de cinco mil
participantes según los organizadores. Todo transcurrió bajo absoluta
normalidad. Este año un pelotón de la Policía Naval apoyó a los cuerpos de
seguridad.
Armando Mora
Tal como estaba
programado, ayer a las tres de la mañana partióel grueso de los feligreses que
caminaron 13.5 kilómetros, desde el Peaje Los Médanos, hasta el Santuario de
las Animas de Guasare, en su Séptima edición.
Superando las
expectativas del comité organizador, un verdadero río humano llenó la
intercomunal Coro Punto Fijo, desde la estación del Peaje los Médanos, hasta el
Santuario Santo Cristo de Guasare.
Personas de diversas
partes del país, caminaron desde las tres de la madrugada, hora oficial de la
salida y llegaron desde las cinco hasta las seis de la mañana el grueso de
personas, y los rezagados fueron llegando poco a poco, de acuerdo a su ritmo de
caminar y de la promesa a pagar, ya que hubo quienes recorrieron el trayecto descalzos.
Son 13 kilómetros que
distan desde el inicio hasta la culminación de la caminata, donde pudimos
observar a personas de diversas condiciones, unas caminando en familia, otros
con bastones, en coches los niños, en bicicletas, todos con una sola intensión,
demostrar la fe en la Animas y pagar las promesas por favores concebidos. Así
mismo comerciantes pagaron sus promesas obsequiando a los asistentes parrillas
y otros perros calientes, otros paellas y jugos, es decir, cada quien tuvo su
forma de pagar las promesas.
Según monseñor Robert
Medina, párroco de Santo Cristo de Guasare y del comité organizador, este año
se superaron las expectativas, donde según su apreciación, más de cinco mil
devotos asistieron a la caminata y quienes no la hicieron acudieron en sus
vehículos y se hicieron presentes en la homilía y pagaron sus promesas. Este
año hubo muy buena seguridad, donde además de los cuerpos de seguridad que cada
año nos acompañan como Polifalcón, Tránsito, Polimiranda, Guardia Nacional,
hubo un pelotón de la Policía Naval que también colaboró en todo el trayecto,
donde hubo puntos de hidratación para quienes efectuaron la caminata. La
caminata de este año tuvo como lema caminemos en misericordia, con amor. La homilía
la dirigió el presbítero Cristóbal Rivero, de la Parroquia Eclesiástica San
José de Coro, acompañado por el presbítero Eduardo Chirinos y Monseñor Robert
Medina.
Así mismo Nelson Diez, del comité organizador,
en compañía de Richard Ramírez, José Gregorio Loyo, Randy Petit, entre otros,
precisó que hubo en el trayecto de los 13 kilómetros, 4 puntos de hidratación,
donde se contó con el apoyo del cuerpo de Bomberos, Polifalcón, Polimiranda,
Tránsito Terrestre, Policía Naval, empresas privadas e instituciones.
Cabe destacar el apoyo
de la cooperativa Ánimas de Guasare, líneas de Transporte San José quienes
transportaron a los caminantes de regreso.
Esta caminata se
inició como una forma de pagar promesa y donde estuvo muy activo el siempre
recoradado Guzmán Alberto Carrera, donde se hizo la primera en 2009 y se
instituyó que cada último domingo de octubre, por ser el mes de las ánimas se
iba a organizar la caminata y ya hoy es una tradición que a siete años, cada
edición suma más devotos y caminantes.
Historia
Cuenta la tradición
oral e investigadores como Eudes Navas Soto, que a principios del siglo XX,
específicamente por ahí por los años 1905-1911, las precipitaciones
disminuyeron dramáticamente, con la llegada del fenómeno del “niño”,
acentuándose más hacia finales de 1911, lo que propicio una de las más feroces
sequias que se tenga noticia. En el estado Falcón, durante todo el año de 1912,
simplemente nunca llovió.
“Los habitantes de la Península
de Paraguaná, quienes vivían del cultivo y la cría de ganado caprino, veían
impotentes cómo sus tierras se volvían unas polvaredas. La situación se volvió
tan desesperada, que se decía que los animales enloquecidos bebían agua del
mar. Para colmo de males, una plaga de langostas azoto la península hacia julio
de 1912, acabando con las pocas plantas de aun quedaban.
Quienes poseían
recursos económicos, traían agua y comida desde Aruba. Se trato, a lomo de
mula, de llevar agua desde Coro, sin embargo, esto resulto inviable.
Desesperados, se enviaron emisarios a la capital, de forma que el gobierno
nacional, de la mano férrea de Juan Vicente Gómez, tomara medidas para llevar
agua la sedienta península, pero no hubo respuesta.
Y así comenzó el éxodo…
la población abandono la árida tierra hacia el continente atravesando el istmo.
Los mas débiles, simplemente, murieron en el camino, víctimas del hambre y la deshidratación;
otros, emprendieron el camino de la eternidad entre los médanos, totalmente
desorientados.
No se sabe realmente
la cantidad de personas que murieron durante la gran sequia del año 12. Luego,
con el arribo de “la niña” un fuerte invierno causo inundaciones devastadoras…
Nadie pudo olvidar, durante muchos años, los duros momentos y las vidas
perdidas a consecuencia de estos fenómenos climáticos.
Hacia 1940, un pastor encontró
tres cadáveres, victimas del año 12, en la zona del istmo en el sitio llamado “Guasare”
nombrada así por un árbol del mismo nombre. Este hombre decidió levantar un
pequeño túmulo sobre los huesos y en las noches su familia y vecinos encendían
velas y rezaban por las ánimas de los muertos. Era la época del “reventón”
petrolero, y pronto una trocha se levanto al lado del pequeño monumento.
Pronto, viajeros comenzaron hacer altos en su camino para “rezarle” a las ánimas
y pedir favores, que pronto, fueron concedidos”.
Hoy, con el apoyo de
la Iglesia, de devotos anónimos se levanto y modrenizó una capilla, está
pendiente el campanario que llevan buen ritmo la construcción y este sitio se
ha convertido en una parada casi obligatoria de todo quien viaje hacia Punto
Fijo, bien de Coro o de otra región del país.
LEYENDAS
1.- A las cinco de la
mañana empezaron a llegar los feligreses
2.- Poco a poco fue
llegando la caminata de las promesas
3.- Más de cinco mil
caminantes participan este año
4.- Completamente
lleno los espacio frente a la capilla Santo Cristo de Guasare
5.- Una forma de pagar
las promesas como todos los años, regalando parrillas a los fieles.
6.- Una enorme cola, pero
no era para comprar un producto regulado y escasos, sino para obtener una
parrilla gratis…
7- Despuntado el alba,
los caminantes hacían su llegada al Santuario
8.- Las fuerzas
policiales dieron su apoyo en todo el recorrido y en el Santuario
9.- Hasta bebecitos en
sus coches si hicieron presente
10.- Paella y jugo
también fueron obsequiado por quienes pagaban promesas
11.- La Virgen del
Carme presidió el grueso de la caminata
12.- Prenderle una
vela a las Ánimas es parte del ritual
13.- Parte de los
organizadores de la VII Caminata; Nelson Diez, Richard Ramírez, Jhonny Ortega,
Gregorio López, Randy Petit…
14.- Monseñor Robert
Medina, este año pasamos los cinco mil visitantes.
15.- Nelson Diez, todo
transcurrió bajo la normalidad esperada
16.- Grupo de
ciclistas también dijeron presente
17.- El transporte de
regreso a la Bomba Lara fue gratuito…
18.- Monseñor Robert
Medina, en compañía de los presbíteros Cristóbal Rivero y Eduardo Chirinos.
19.- José Sabeta,
regaló quinientos perros calientes a los caminantes